La creatividad, ese objeto de deseo

Quién no ha hablado alguna vez de la creatividad, en su entorno personal, en su trabajo… Lo cierto es que esta cualidad se presenta como un elemento imprescindible en muchas ocasiones para conseguir el éxito profesional y comprobar lo innovadora que es una persona puede ser una manera de evaluar utilizada en las empresas. Que no cunda el pánico, porque aunque muchos afortunados la poseen de manera innata, aquellos que no se consideran tan creativos, están de suerte porque se puede educar siguiendo algunas rutinas. Si bien es cierto que no hay nada mágico y se debe trabajar y perseverar. La creatividad es un elemento importante a la hora de forjar nuestra marca personal.

Seguir aprendiendo: Las personas creativas son personas con inquietudes y pasión por la recopilación de nueva información. Siempre buscan alternativas y se hacen preguntas. No hay que quedarse en lo superficial.

Observación: Los sentidos están para utilizarlos y no debemos dejar de observar nuestro entorno poniendo en funcionamiento todos nuestros mecanismos. Lo que nos rodea es una gran fuente de información y hay que saber aprovecharla.

¿Quién dijo error?: Una persona creativa no tiene miedo al fracaso porque sabe como gestionarlo. Con esos errores crean oportunidades de aprendizaje y evalúan lo que salio mal para evitar que vuelva a ocurrir.

Todos tenemos un niño dentro: Esta idea siempre es muy utilizada pero es que esla verdad. Debemos recuperar a ese pequeño que cada persona tiene y ver la vida con una filosofía diferente, disfrutando de lo que hacemos, divirtiéndonos como hacíamos cuando éramos niños.

Apertura mental: Tener una actitud y una mente abierta ayuda y mucho. No se debe juzgar con rapidez y hay que evaluar y pensar el por qué de las cosas antes de tomar decisiones para evitar que sean precipitadas.

Olvidarse del reloj: La creatividad es libre y no atiende a horarios muy estrictos y eso hay que tenerlo en cuenta. Suele manifestarse a primera y última hora del día y se debe aprovechar esos instantes para poder sacar algo provechoso.

-Soñar despierto no es malo: Al contrario, muchas investigaciones demuestran que esta práctica puede sacar lo mejor de uno mismo.

Arriesgarse: No hay que tener miedo de empezar un proyecto y que fracase. Una persona creativa toma ese riesgo y aunque el resultado al final no sea el deseado, el propio proceso y todo lo que conlleva ya es motivador y gratificante.

La imaginación al poder: dar vueltas a la cabeza, pensar en diferentes posibilidades. Imaginar debe tomar protagonismo en toda nuestra vida, en los diferentes ámbitos, no solo en el laboral.

 

Foto: taringa.net

Puede que también te interese...